Hacerse cargo de personas dependientes no es una tarea fácil. En estas circunstancias es importante tener las capacidades y aptitudes para garantir su bienestar físico y emocional. ¿Te gustaría saber más acerca de cómo hacerlo? En el artículo de hoy te explicaremos que aptitudes debe tener un cuidador, además te proponemos el curso de técnico experto en atención y apoyo psicosocial de las personas dependientes para que puedas formarte y aprender a nivel experto.
Índice de contenidos
Aptitudes personales y profesionales del cuidador de personas dependientes
- Paciente y empático:
En primer lugar, saber comprender y ponerse en el lugar de la otra persona, comprender como se siente y empatizar con él es fundamental para tratar a personas dependientes o con ciertas dificultades. En ocasiones, las personas dependientes sienten que son una carga para los demás, a todo mundo le gustaría valerse por sí mismo o no depender de alguien, y en ocasiones cuando uno no puede, no es fácil de aceptar. La persona al cargo debe entender que psicológicamente son más vulnerables, además sus capacidades físicas son reducidas y no pueden moverse ágilmente, de manera que no se les puede exigir rapidez o imponer prisas. Por ello, el cuidador debe tener paciencia y comprensión.
- Amable y respetuoso:
Estaremos de acuerdo, que estas van en relación con las anteriores. El cuidador si empatiza con el paciente, será capaz de establecer un vinculo respetuoso. Es importante ser amable con la persona para que ella se sienta lo más cómoda posible y gane confianza, para el paciente será todo más fácil. Se trata escucharlo, respetarlo y comprender su estado de ánimo, ya que, perder autonomía y parte de la intimidad no es agradable para nadie.
- Formado en cuidados específicos.
Además de comprender la parte emocional, tener una actitud positiva y la voluntad de ayudar, es necesario tener conocimientos y contar formación especializada en el ámbito de cuidados específicos y asistencia sanitaría.
Entre las tareas, el cuidador deberá efectuar traslados o colaborar en la movilidad del paciente, asistirle en las tareas domésticas, de higiene personal, curas básicas, también controlar su medicación, hacerle compañía y mediar en conflictos.
4 cosas que debes tener en cuenta en su cuidado
Como hemos dicho, las personas dependientes dejan de ser autónomas, de forma total o parcial. Entonces, en la labor del cuidador es importante considerar varios aspectos para asegurar su bienestar e intentar hacer su día a día más fácil y feliz.
Se trata de intentar que la persona tenga unos hábitos y la máxima estabilidad posible. ¿Cómo hacerlo? Presta atención a los siguientes consejos:
1. Establecer rutinas y hábitos saludables
Es vital trasmitirles calma y tranquilidad. Establecer unos hábitos y orden del día a día les ayuda a mantener su estabilidad emocional. Es bueno mantener una rutina adaptada a su ritmo de vida, para que se sientan cómodos y seguros. Para ello, es importante fijar horarios de las comidas, aseo, actividades, etc. Además, cuidar de su higiene y aspecto, proporcionarles una alimentación saludable para que estén sanos, con fuerza y vitalidad
2. Entrenamiento físico y mental
La tarea de mantener la actividad física y mental en el cuidado de personas dependientes también es esencial para ejercitar el estado físico, su movilidad y mantener activa su mente.
3. Fomentar su participación en sociedad
Es importante mantener socialmente activo a la persona. Fomentar la interacción con sus círculos de amistad y familia. Por esa razón, una buena opción es preparar actividades, salir a pasear acompañado de seres queridos y en familia. Prestarles atención y escuchar, así aprender de sus experiencias. En definitiva, potenciar sus vivencias positivas, fomentar sus capacidades, habilidades y participación en sociedad.
4.Mostrar afecto y amor
El afecto de la persona que esta a su cargo, la familia o de amistades mantiene vivo su espíritu. Le ayuda a reforzar su positividad, confianza y autoestima.