Hasta ahora, la compra compulsiva ha sido un trastorno poco conocido entre la población. Sin embargo, el auge de las tiendas online y el confinamiento provocado por la pandemia actual ha significado un repunte de casos con este tipo de patologías.

La compra compulsiva u oniomanía ocasiona graves problemas, tanto para la persona como para su entorno. Pues en muchos casos deriva no solamente en problemas económicos sino también en conflictos familiares.    

Dado el aumento de este tipo de trastornos, que en ocasiones tiene que ver con otras patologías psiquiátricas, en este post hablaremos de sus síntomas y las recomendaciones de los expertos para superarlo. Además, puedes completar tus conocimientos sobre sobre este ámbito de estudio con nuestras titulaciones especializadas en Psicología Social

Trastorno por compra compulsiva

La compra compulsiva es una enfermedad que se clasifica dentro de los trastornos del control de los impulsos, de modo que comparte rasgos con la ludopatía o la cleptomanía.

Síntomas de la oniomanía

Este tipo de trastorno, concretamente, se caracteriza por la permanente necesidad de comprar cualquier tipo de objeto banal, y su impulso viene fundado por sentimientos de ansiedad o irritabilidad. Acto seguido, después de sentir un momento efímero de felicidad y satisfacción por la compra realizada, estas sensaciones se convierten en culpabilidad y vergüenza, pues en muchas ocasiones arrastran deudas y por ende, problemas con su entorno.

Los especialistas describen una serie de síntomas claros:

  • Ansiedad por la necesidad de consumo
  • Frustración e insatisfacción después de la compra
  • Cambios de humor constantes
  • Sentimiento de culpabilidad
  • Inquietud y estrés
  • Insomnio
  • Falta de control de sus actos
  • Autoestima baja

Tal y como señalan los expertos, es importante detectar este tipo de síntomas a tiempo, de lo contrario la persona puede desarrollar una dependencia emocional grave hacia las compras. 

¿Cómo controlar la compra compulsiva?

Con la compra online es fácil y rápido adquirir todo tipo de objetos y a cualquier hora del día. Este hecho ha significado un aumento de personas con trastorno por compra compulsiva, sobre todo entre las personas más vulnerables con una autoestima baja. Con el confinamiento y el malestar general provocado por la situación actual ha contribuido también a este aumento. 

Su tratamiento consiste en trabajar el autocontrol. Con la ayuda de un especialista, la persona afectada debe, primero, identificar de dónde proviene su necesidad de compra para luego hacerle frente y oponer resistencia. 

Por otro lado, también es importante contar con el apoyo familiar. En muchos casos la familia desconoce que la persona en cuestión pueda estar padeciendo este tipo de trastorno o enfermedad. Involucrar, en la medida de lo posible, a los familiares del paciente le ayudará a superar con mayor facilidad su problema.

De modo que si detectas este tipo de comportamiento en tu ambiente más cercano, los expertos recomiendan replantear el acceso a Internet y limitar las tarjetas para la compra en línea, y contar con la ayuda de un especialista para conseguir controlar la compra compulsiva