El envejecimiento activo es un concepto clave en la promoción de una vida saludable y plena para las personas mayores. En un mundo donde la esperanza de vida ha aumentado significativamente, es esencial centrarse no solo en prolongar los años de vida, sino en asegurarse de que estos años sean vividos con calidad y bienestar. En este blog veremos las claves del envejecimiento activo, ejemplos y estrategias para fomentarlo. ¿Nos acompañas?

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¿Qué es el envejecimiento activo?

El envejecimiento activo se refiere al proceso de optimizar las oportunidades de salud, participación y seguridad para mejorar la calidad de vida según se envejece. El objetivo es permitir que las personas mayores realicen su bienestar físico, social y mental a lo largo de su vida y participen en la sociedad según sus necesidades, deseos y capacidades.

El concepto de envejecimiento activo se basa en el reconocimiento de que las personas mayores son un recurso valioso para sus familias, comunidades y economías. Implica fomentar un enfoque positivo del envejecimiento, en el que se valoren las contribuciones de las personas mayores y se promuevan políticas y prácticas que apoyen su participación continua en la sociedad.

¿Cuáles son los 4 pilares del envejecimiento activo?

Los 4 pilares del envejecimiento activo son el bienestar emocional, la cohesión social, la resiliencia y el crecimiento cognitivo. Veamos en mayor profundidad en qué consiste cada uno de ellos:

  1. Bienestar emocional. Se centra en la promoción de una salud mental positiva, la reducción del estrés, el manejo de la depresión y la ansiedad y el fomento de emociones positivas a través de actividades gratificantes y relaciones significativas.
  2. Cohesión social. La participación activa en la sociedad y el mantenimiento de conexiones sociales son cruciales. Esto incluye el fortalecimiento de las relaciones interpersonales, la participación en actividades comunitarias y la construcción de redes de apoyo.
  3. Adaptación y resiliencia. La capacidad de adaptarse a los cambios y superar las adversidades es esencial. Esto implica desarrollar habilidades de afrontamiento, mantener una actitud positiva y fomentar la capacidad de resiliencia ante los desafíos del envejecimiento.
  4. Crecimiento personal y cognitivo. Promover el aprendizaje continuo y el desarrollo personal es fundamental para mantener la agudeza mental y el sentido de propósito. Esto incluye el aprendizaje de nuevas habilidades, la participación en actividades cognitivamente estimulantes y la exploración de nuevas experiencias.

Envejecimiento activo: ejemplos

En la psicología encontramos mucha información acerca de qué es el envejecimiento activo, ejemplos y más. Por ello, comprender de qué formas se puede promover el bienestar emocional y mental permite acceder a una mejor calidad de vida en la tercera edad.

Estos son 4 ejemplos de envejecimiento activo:

  • Mantener relaciones interpersonales. La conexión social es crucial para la salud mental en la vejez. Ejemplos de ello son mantener contacto regular con amigos y familiares, participar en grupos sociales o de apoyo y establecer nuevas amistades.
  • Participación en actividades significativas. Las actividades que aportan un sentido de propósito y logro son fundamentales. Pueden ser voluntariados, participación en proyectos comunitarios, hobbies creativos como la pintura o la música, y la práctica de la meditación o el yoga.
  • Desarrollo de la resiliencia. Fomentar la capacidad de adaptación ante los cambios y desafíos de la vida es esencial. Esto incluye aprender nuevas habilidades, enfrentar y superar pérdidas, y mantener una actitud positiva ante el envejecimiento.
  • Apoyo emocional y psicológico. Acceder a servicios de asesoramiento o terapia puede ser beneficioso. Por ejemplo, los grupos de apoyo, la terapia cognitivo-conductual y las intervenciones basadas en la atención plena son ejemplos de cómo se puede promover el bienestar emocional.

Estrategias para fomentar el envejecimiento activo

Fomentar el envejecimiento activo requiere una combinación de intervenciones a nivel individual, comunitario y político. Para lograrlo, hay algunas estrategias entorno al envejecimiento activo, ejemplos que pueden servir para poner en marcha programas efectivos en esta área:

  1. Ofrecer talleres y terapias de bienestar emocional. Facilitar el acceso a servicios de salud mental para abordar problemas emocionales y psicológicos, e implementar programas de atención plena, talleres de meditación o facilitar el acceso a clases de yoga, por ejemplo.
  2. Crear grupos de apoyo. Crear y promover grupos en los que compartir experiencias y recibir apoyo emocional en aquellos casos en los que sea necesario. Además, también es útil organizar actividades sociales y recreativas que fomenten la interacción y la conexión entre los miembros de la comunidad.
  3. Entrenamiento neuropsicológico. Ofrecer talleres y programas que enseñen habilidades de afrontamiento efectivas, estrategias de manejo del estrés y actividades para fortalecer las habilidades neuropsicológicas.
  4. Fomento de la cohesión social. Crear espacios en los que reunirse, actividades de grupo y dinámicas que faciliten el contacto con otras personas mayores. El objetivo es combatir la soledad que muchas de ellas sufren.
  5. Educación continua. Establecer programas educativas y de capacitación que permitan a las personas mayores aprender nuevas habilidades y conocimientos.
  6. Fomentar actividades cognitivamente estimulantes. Fomentar la participación en actividades como juegos de mesa, lectura, escritura y otras actividades que mantengan la mente activa y comprometida.

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