Ansiedad y depresión van muchas veces de la mano, pero no son lo mismo. Los dos son trastornos mentales comunes en la sociedad actual. Comprender sus diferencias es fundamental para abordar adecuadamente cada uno de estos trastornos y proporcionar el apoyo necesario a quienes los padecen.

Diferencias entre ansiedad y estrés

En primer lugar, es importante comprender las diferencias entre ansiedad y estrés. La ansiedad es una respuesta emocional caracterizada por sentimientos de preocupación, inquietud y temor ante situaciones que se perciben como amenazantes. El estrés, en cambio, es la respuesta del cuerpo a una demanda o desafío.

Dicho de otro modo, la ansiedad es una reacción normal ante el estrés, pero puede convertirse en un trastorno si es excesiva y persistente. A corto plazo, el estrés puede ser motivador, pero cuando se cronifica aparecen efectos negativos como la ansiedad.

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Diferencias entre ansiedad y depresión

Ahora que ya entendemos qué es ansiedad, pasemos a identificar las principales diferencias entre ansiedad y depresión:

Naturaleza de las emociones

La ansiedad está marcada por un estado constante de alerta y miedo, mientras que la depresión se caracteriza por un estado persistente de tristeza y desesperanza. Las personas con ansiedad suelen preocuparse excesivamente por el futuro y los posibles peligros, mientras que las personas con depresión suelen centrarse en los fracasos del pasado y la percepción de inutilidad en el presente.

Efectos físicos

Aunque los dos trastornos pueden compartir algunos síntomas físicos, los específicos pueden ser diferentes. Por su lado, la ansiedad puede causar palpitaciones, sudoración y temblores, que están más relacionados con la activación del sistema nervioso autónomo. En contraste, la depresión puede manifestarse con cambios significativos en el apetito, dolores corporales sin causa aparente y una marcada falta de energía.

Patrones de pensamiento

La ansiedad viene acompañada de pensamientos catastróficos y una tendencia a sobrestimar el peligro de las situaciones. Las personas que la sufren pueden tener problemas para concentrarse a. causa de esta preocupación constante. En cambio, en la depresión, aparecen pensamientos negativos sobre sí mismos, su vida y el futuro, y pueden experimentar una disminución en la capacidad de pensar, concentrarse y tomar decisiones.

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Comportamiento

Quiénes sufren ansiedad evitan situaciones que perciben como peligrosas, lo que les lleva a la evitación social y a la limitación de sus actividades diarias. En cambio, las personas con depresión a menudo experimentan una pérdida de interés en actividades que antes disfrutaban, aislamiento social y una disminución general de la motivación para realizar tareas diarias.

Duración

La ansiedad puede ser episódica o continua, pero, por lo general, aparece por situaciones específicas o pensamientos preocupantes. La depresión, por otro lado, tiende a ser más persistente y puede durar semanas, meses o incluso años, afectando de manera continua el estado de ánimo de la persona.

Conocer las diferencias entre ansiedad y depresión es clave para poder realizar un diagnóstico correcto y aplicar el tratamiento más adecuado en cada caso. Fórmate en psicología y especialízate en el cuidado de la salud mental con la Escuela de Postgrado de Psicología y Psiquiatría.

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