Con el paso de los años, y al llegar al envejecimiento, ciertas capacidades relacionadas con la memoria y los procesos mentales pueden verse mermadas. En estos casos, podemos hablar de deterioros cognitivos, ya sean leves o más severos. En este artículo te explicamos qué es un deterioro de las funciones cognitivas y qué tipos hay, así como sus causas y los tratamientos que se pueden aplicar.

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¿Qué es un deterioro cognitivo?

Un deterioro cognitivo es una enfermedad que se caracteriza por el declive de las funciones asociadas a la memoria, el aprendizaje y el procesamiento mental. Dichas alteraciones pueden derivarse del curso natural del envejecimiento o tener otras causas.

¿Qué causa un deterioro cognitivo?

En general, la vejez es la principal causa de las alteraciones cognitivas. No obstante, el estilo de vida que se adopta hasta llegar a la etapa senior incrementa o reduce la probabilidad de padecer este tipo de trastornos. Igualmente, se han relacionado enfermedades como la diabetes, la hipertensión, la obesidad o la depresión como factores de riesgo.

¿En qué se diferencia un deterioro cognitivo de la demencia?

Al hablar de trastornos cognitivos es importante distinguir el deterioro cognitivo leve de la demencia, ya que se suelen confundir. La principal diferencia entre un deterioro cognitivo leve y la demencia es que en esta última, además de la memoria, se ven afectadas otras áreas cerebrales. Esto, a su vez, dificulta la capacidad de desarrollar actividades cotidianas como estas:

  • Incapacidad de recordar nombres de personas (incluso familiares) y de objetos.
  • Complicaciones para realizar tareas que antes se llevaban a cabo fácilmente.
  • Pérdida de objetos, como las llaves de casa, por ejemplo.
  • Alteraciones en la conducta y el estado de ánimo.
  • Falta de capacidad para orientarse y no perderse.
  • Dificultades para mantener relaciones sociales.

Además, en la demencia, a medida que avanza la enfermedad, todos estos síntomas se agravan hasta el punto de que el paciente no es capaz de ocuparse de sí mismo. Mayormente, la enfermedad de Alzheimer es la principal causa de demencia y una de las enfermedades degenerativas más comunes, cuya evolución genera problemas en la memoria, la conducta y el pensamiento.

Tipos de deterioros cognitivos y síntomas

Las personas que padecen un trastorno cognitivo pueden presentar dificultades para procesar, recordar y gestionar la información. En este sentido, áreas como la percepción, la atención, la memoria o el lenguaje se ven afectadas y, con ello, la calidad de vida de los pacientes.

Cabe destacar que, en función del grado de gravedad, existen diferentes tipos de deterioros cognitivos, como el deterioro cognitivo leve o el deterioro cognitivo severo (conocido también como demencia grave).

Para determinar el tipo de deterioro, se suele realizar un test de deterioro cognitivo que engloba distintas pruebas que miden el estado de las capacidades como la memoria, el lenguaje o el reconocimiento de objetos. Una vez se detecta el nivel de trastorno cognitivo de cada persona se puede adecuar el tratamiento a sus necesidades.

A continuación, vamos a conocer cuáles son los principales tipos de deterioros de las funciones cognitivas:

Deterioro cognitivo leve

Un deterioro cognitivo leve significa tener pérdidas de memoria o alteraciones relacionadas con la cognición, pero estas no afectan al funcionamiento cotidiano. Esto sería, por ejemplo, tener dificultades para recordar cosas cuya memoria antes podía retener fácilmente. Por tanto, este tipo de deterioro sobre las funciones cognitivas es leve y no repercute de forma significativa en la vida del paciente.

Deterioro cognitivo medio o demencia leve

Un deterioro cognitivo de grado medio o demencia leve se caracteriza por una considerable desorientación en la percepción espacial y temporal. Asimismo, suele ocurrir que la persona olvide los nombres de sus allegados o que manifieste problemas de memoria reciente, además de algunos cambios en su estado de ánimo, como una mayor irritabilidad, por ejemplo. Por lo tanto, en una demencia leve las capacidades cognitivas se empiezan a resentir de una forma más marcada.

Deterioro cognitivo notable o demencia moderada

En el tercer grado de deterioros cognitivos nos encontramos con la demencia moderada. En este caso, los síntomas se hacen más visibles, ya que el paciente no es capaz de comprender y ejecutar órdenes. Se desorienta fácilmente y presenta dificultades en el aprendizaje.

En una gran mayoría de casos, el deterioro cognitivo moderado avanza hasta dificultar las actividades básicas cotidianas. Además, este trastorno influye en el comportamiento de la persona generando estados de ansiedad, agresividad o depresión.

Deterioro cognitivo severo o demencia grave

En la demencia grave, generalmente, no existe la posibilidad de comunicarse con el paciente, dado que este ya no comprende el mensaje ni puede responder al mismo. Se produce una pérdida completa de la memoria a largo plazo y la persona es totalmente dependiente, ya que no puede cuidar de sí misma.

Tratamiento de los deterioros cognitivos

Estudiar el máster en neuropsicología y deterioros cognitivosSi bien es cierto que la ciencia avanza y cada vez existen más tratamientos para detener el curso de varias enfermedades, en el caso de los deterioros cognitivos y la demencia, el tratamiento consiste en prolongar la esperanza de vida del paciente y que este pueda vivir el máximo de tiempo posible de manera autónoma y con bienestar.

Para maximizar la eficacia de los tratamientos en los trastornos cognitivos es fundamental realizar un diagnóstico precoz. Cuanto antes se detecten los primeros síntomas, antes se puede actuar y evitar, en la medida de lo posible, que el problema vaya a más.

Algunos de los métodos que más se utilizan son los ejercicios de estimulación cognitiva o juegos como los puzzles, los cuales ayudan a activar el cerebro y la memoria. Asimismo, una alimentación nutritiva y saludable, así como la práctica de actividad física, son aspectos que mejoran la calidad de vida de estos pacientes.

Disponer de toda la información y saber cómo abordar cada trastorno cognitivo es decisivo para que los pacientes evolucionen favorablemente. En Escuela de Postgrado de Psicología y Psiquiatría impartimos el máster en neuropsicología y deterioros cognitivos dirigido a todos aquellos profesionales que deseen ampliar sus competencias en este campo y contribuir a la promoción de la salud física y mental en todas las etapas de la vida.