Quienes padecen depresión experimentan una serie de síntomas que interfieren con su capacidad para cumplir con las exigencias de su trabajo. En estos casos, la baja por depresión se convierte en una medida necesaria para proteger tanto la salud mental del trabajador como el buen funcionamiento de la empresa. ¿Nos acompañas para conocer más acerca de en qué consiste esta baja, los síntomas a los que estar atento y cómo afecta esta enfermedad mental al desempeño de los empleados?
Estudia recursos humanos y aprende a gestionar el clima y las condiciones laborales para garantizar el bienestar de los trabajadores.
Índice de contenidos
¿Qué es la baja laboral por depresión?
La baja laboral por depresión es un tipo de incapacidad temporal reconocida legalmente que permite a un empleado ausentarse de sus responsabilidades mientras recibe tratamiento para superar un cuadro depresivo. Este proceso implica la evaluación médica de un profesional de la salud, quien debe constatar que la persona afectada no está en condiciones de desempeñar sus funciones laborales habituales. La baja busca proporcionar el tiempo necesario para que el trabajador se recupere, evitando así el agravamiento de los síntomas o el riesgo de recaídas.
La baja por depresión no protege solo al empleado. También protege a la empresa, ya que evita situaciones que puedan comprometer el rendimiento general de la organización o que puedan llegar a generar conflictos.
¿Por qué no se puede trabajar con depresión?
Pero, ¿qué problemas de rendimiento o conflictos puede generar? Trabajar bajo un cuadro depresivo puede generar problemas personales y profesionales. La depresión afecta varios aspectos cognitivos y emocionales que son clave para realizar las tareas laborales de manera efectiva.
Estas son las principales razones por las que no se puede trabajar con depresión:
- Disminución del rendimiento. La depresión afecta la concentración, la memoria y la capacidad para tomar decisiones. Estas dificultades cognitivas pueden conllevar un bajo rendimiento laboral, lo que repercute negativamente en la calidad del trabajo.
- Fatiga física y mental. La depresión suele estar acompañada de una sensación constante de agotamiento, que puede hacer que el trabajador se sienta incapaz de llevar a cabo sus actividades diarias con normalidad.
- Desmotivación y falta de interés. Las personas con depresión suelen experimentar una pérdida generalizada de interés en sus actividades, incluyendo las laborales. Esto puede llevar a una baja productividad y al deterioro de la relación con los compañeros y superiores.
- Riesgo de errores. Dado que la depresión afecta las capacidades cognitivas, aumenta el riesgo de cometer errores en tareas importantes, lo que podría generar conflictos dentro de la empresa o incluso poner en riesgo la seguridad de otras personas.
Conoce las principales teorías de la motivación y aprende cuáles se aplican para mejorar el compromiso de los empleados.
¿Cuánto puede durar una baja por depresión?
La duración de una baja por depresión es variable y depende de múltiples factores, incluyendo la gravedad del trastorno, la respuesta al tratamiento y las circunstancias personales del trabajador. Por lo general, la baja por depresión puede durar desde unas pocas semanas hasta varios meses.
En España, el periodo máximo de baja por enfermedad común es de 12 meses, aunque puede prorrogarse otros seis meses si los servicios médicos consideran que existe una posibilidad de recuperación durante ese tiempo. En casos más graves, si la persona no ha mejorado, se puede evaluar la posibilidad de una incapacidad permanente, que dependerá de la evaluación médica y de la gravedad de los síntomas residuales.
Síntomas de la baja por depresión
Los síntomas que suelen llevar a una baja laboral por depresión son variados y pueden manifestarse de diferentes manera en cada individuo. No obstante, hay varios signos que son comunes en la mayoría de los casos y que, al ser identificados, pueden indicar la necesidad de una baja laboral.
Algunos de los síntomas más frecuentes son:
- Tristeza profunda y persistente. La sensación de tristeza constante es uno de los síntomas más característicos de la depresión, que puede venir acompañada de sentimientos de inutilidad y desesperanza.
- Pérdida de interés. Las actividades que antes resultaban placenteras se vuelven insulsas y no hay interés alguno en ellas, lo que afecta tanto la vida personal como laboral.
- Problemas para dormir. Puede haber insomnio o, en algunos casos, un exceso de sueño. Ambos extremos impactan negativamente en la capacidad del trabajador para rendir de manera adecuada.
- Dificultad para concentrarse. Esto conlleva problemas para realizar tareas que requieren una atención prolongada o habilidades cognitivas específicas.
- Fatiga constante. El agotamiento físico y mental es un síntomas común que impide a las personas realizar actividades que, en otras condiciones, no serían un esfuerzo tan significativo.
- Cambios en el apetito. Puede verse reducido en algunos casos o, en otros, la persona puede recurrir a la comida como una forma de afrontamiento, lo que puede llevar a variaciones notables en el peso.
Te puede interesar: ¿Qué es la psicología del trabajo y por qué es importante?
Importancia de los RR.HH. en el clima laboral
La detección temprana de situaciones de estrés o depresión puede marcar la diferencia en la prevención de bajas laborales prolongadas y en la creación de un ambiente de trabajo saludable.
Desde los recursos humanos es posible establecer programas de apoyo psicológico, fomentar la flexibilidad laboral y promover el equilibrio entre la vida laboral y la personal. Todas ellas son medidas clave que pueden prevenir el desarrollo de trastornos depresivos en el entorno laboral.
Los responsables de RR.HH. deben garantizar un seguimiento constante del empleado durante su baja y facilitar su reintegración mediante planes de reincorporación gradual, permitiendo así que el trabajador se sienta apoyado y comprendido. Además, crear un entorno laboral donde se promueva la empatía y se reduzca el estigma en torno a los problemas de salud mental es crucial para que los empleados se sientan seguros al expresar sus dificultades y buscar apoyo cuando lo necesiten.
Por ello, contar con una formación especializada en recursos humanos permite fomentar el bienestar y contribuir a mejorar la calidad de vida de los empleados, lo que, al mismo tiempo, aumenta la productividad y reduce el riesgo de bajas en la empresa.
¡Consulta todo lo que te puede aportar la titulación en recursos humanos de nuestra escuela!